Nuestra propia historia ¿Podemos Escribirla?

Nosotros podemos -de hecho lo hacemos- escribir nuestra propia historia. O sea, cuando nuestra vida está más cerca del final que del inicio, podemos mirar hacia atrás y ver la historia que dejamos detrás. El legado que dejamos a nuestros hijos es la acumulación de las elecciones que hemos hecho a lo largo de todo nuestro camino.

A medida que escribo, me doy cuenta de que muchos de ustedes podrían escuchar esto y parecerle desesperanzador, pero podemos ser pro-activos y decidir ahora que comenzaremos a hacer elecciones, que nos llevarán hacia nuestras tan deseadas metas.

Antes que nada, querría dejar algo en claro: Creo firmemente que cualquier persona puede...

...tener tanto dinero como elija tener
...pesar cuánto elija pesar
...trabajar en aquello que elija trabajar
...tener tanta paz como elija tener
...hacer cualquier cosa que elija hacer

Si usted desea ver su vida mejorar continuamente y cambiar para mejor, éste es un pensamiento que bien podría abrazar. Nuestra habilidad -como seres humanos- de elegir es increíble, pero también trae idóneas cuestiones filosóficas: este enorme poder que tenemos es un privilegio, una oportunidad y una responsabilidad. Cuando nos demos cuenta del rol que estas tres cuestiones juegan en nuestras vidas (y nos disciplinemos para elegir aquello que deseamos cuidado! ...porque podríamos obtenerlo.

La habilidad de elegir es un privilegio: los perros no la tienen; las vacas tampoco. Los únicos que tienen la habilidad de elegir somos nosotros los seres humanos, todas las demás criaturas viven por instinto.

¿Alguna vez vio su habilidad para elegir como un privilegio que le fue concedido? Hacerlo es uno de los actos más motivadores para comenzar la disciplina de elegir conscientemente. Ejercite su privilegio desde hoy: realice elecciones que hagan que usted, su familia y su comunidad sean mejores que antes!

La habilidad de elegir es una oportunidad: cada uno de nosotros tiene la oportunidad de mejorarse a sí mismo. Existen infinidades de historias de personas que perdieron el enorme sobrepeso que tenían, que dejaron de beber en exceso, o de fumar, como para que piense de otra manera.

Sin embargo, muchos todavía piensan que es imposible y que no tuvieron nunca la oportunidad. No es verdad: aprovechemos la ventaja que tenemos cada día de cambiar! Realice elecciones día a día, que hagan que usted, su familia y su comunidad sean mejores que antes!

La habilidad de elegir es una responsabilidad: No vivimos en el vacío: vivimos en el contexto de nuestras familias, nuestras comunidades, nuestros trabajos y demás organizaciones a las que pertenecemos. Tenemos la responsabilidad de elegir correctamente, para que estas decisiones influyan positivamente en aquellos a nuestro alrededor.

Tengo dos hijos, Jorge Arturo, Luis Arturo. Las decisiones que tomo cada día, incluso a cada momento, les afectarán por el resto de sus vidas. Por tal motivo, deseo disciplinar mi vida de manera tal que ellos puedan devenir todo aquello que desean ser. Así nuestra familia -y eventualmente las familias que ellos comenzarán- serán mejores.

Cuando pienso en las decisiones personales que cambiaron la historia no pienso en los "caprichos" de los faraones, presidentes o dictadores. Pienso más bien en el acto simple de aquel primer esclavo que dijo "NO". Hizo una elección personal, una que -indudablemente- hacía tiempo venía pensando. Fue su privilegio como ser humano, más allá de las consecuencias que esto podía tener. Fue su oportunidad para hablar y apoyar aquello que era correcto. Fue su responsabilidad para con todos aquellos que harían luego esta elección. Lo hizo... y el mundo cambió.

"La historia de los hombres libres nunca fue escrita por la suerte,
sino por la elección: su elección"
- Dwight D. Eisenhower -

A diario, infinidad de personas realizan elecciones que producen cambios. Son aquellas que osan soñar con una vida mejor, aquellas que se arriesgan al fracaso, aquellas que toman las decisiones correctas que cambiarán sus vidas, sus familias, sus negocios, sus comunidades y sí: el mundo entero. Nuestra habilidad de elegir es un increíble privilegio, una extraordinaria oportunidad y una imponente responsabilidad... Usémosla!

Jorge L. Perez S.